Iniciar proyectos en otros países es más complejo de lo que parece, y sería prácticamente imposible (además de irresponsable) trabajar por nuestra propia cuenta. Es por esta razón que los proyectos los desarrollamos en cooperación con una entidad local, con la que trabajamos mano a mano en cada fase de los proyectos.
¿Qué es una contraparte local?
Una contraparte local es una entidad, por lo general una ONG, que actúa como guía de una organización extranjera en un país o región específica.
Para que los proyectos sean efectivos, contar con la participación de una organización local es fundamental, esta es la encargada de cuestiones como la logística local, la comunicación, la gestión y cualquier procedimiento administrativo que supone implementar acciones sociales en otro país.

Trabajar con una entidad local: esencial para la cooperación internacional
La experiencia ha demostrado que cuando se recurre a las organizaciones locales, las posibilidades de lograr los objetivos aumentan significativamente.
Las contrapartes locales tienen un conocimiento mucho mayor de la cultura, de las necesidades y desafíos de las comunidades, así como también de las regulaciones y políticas gubernamentales locales. De esta forma, la colaboración con una entidad local aumenta exponencialmente el impacto y permite que más personas se puedan beneficiar.

¿Cómo decidimos con quién colaborar?
Trabajamos con personas de entidades que comparten nuestras responsabilidades y compromisos sociales, así como los valores que promovemos.
De este modo, creamos un vínculo solidario que nos da la fuerza necesaria para seguir avanzando.
Sin las contrapartes sociales, nuestro trabajo no sería tan efectivo y, en muchas ocasiones, ¡ni siquiera sería posible!